Creo firmemente que la vida es maravillosa y que hay que disfrutarla al máximo, el rato que estoy aquí, lo quiero pasar lo mejor que pueda. Por eso a mis cuadros les llamo mis fiestas y están llenas e inspiradas en mis pasiones. Obviamente el surf y el skate forman parte de ello, pero también mi familia, mis viajes y muy importante la conexión y relación con las personas.

El arte se trata de transmitir emociones y gracias a ello la obra gana valor. Por eso intento transmitir mi forma de ver la vida, es necesario crear y generar optimismo y por qué no, «buen rollismo» en el mundo, porque repitiendo: la vida es increíble y tenemos que aprender a disfrutarla.